Fuertemente golpeado por la crisis de 2008, el sector de la construcción recuperó, hasta 2020, buena parte de la pujanza perdida. Aunque es un sector que se ha visto afectado por la pandemia, se espera que este mismo año 2022 se recuperen los niveles de actividad de 2019, lo que augura un futuro prometedor.
Todo esto gracias a las ventajas que nos ofrecen las nuevas tecnologías.
Además, el sector de la construcción va a poderse beneficiar los fondos europeos de recuperación, que se espera que empiecen a llegar este año y que ascenderían a un total de 3.500 millones de euros. Para ello, se debe realizar una apuesta decidida por la rehabilitación de edificios y la eficiencia energética y, en general, a la sostenibilidad.
Esta apuesta debe concretarse en medidas para el máximo control sobre los materiales y la optimización del proceso constructivo, así como en la mejora de la elaboración de los proyectos y su accesibilidad dentro de la obra a través de sistemas avanzados, como los sistemas BIM, de los que hablamos más adelante.
Ello ha generado algunos retos que condicionarán las tendencias del sector, como la industrialización y automatización de procesos, la emergencia de los modelos colaborativos, la digitalización a todos los niveles y el desarrollo de las habilidades necesarias.
Nuevas tecnologías en pleno avance: sistemas BIM
BIM (Building Information Modeling) es una metodología, desarrollada a partir de finales de la década de los 90, orientada a generar simulaciones digitales de diseño en 3D en el sector de la construcción, que permitan integrar y coordinar toda la información asociada al proyecto.
En BIM, los objetos y las formas se presentan con metadatos completamente incrustados, relativos a tiempos y costes, de modo que se pueda gestionar la información durante todo el ciclo de vida de un proyecto de manera inteligente.
Por ejemplo, cualquier cambio aplicado al diseño implica la actualización automática de las mediciones a los efectos de ejecución de la obra en todos los elementos relacionados con él.
Los proyectos desarrollados con la metodología BIM incluyen los productos y materiales reales que se utilizarán para construirlos, de forma que integran la información sobre su geometría, características, costo e, incluso, información de contacto para facilitar su aprovisionamiento en la obra.
Además, los sistemas BIM forman parte de las nuevas tecnologías en el sector de la construcción que permiten la definición de roles para cada usuario, que puede acceder y modificar determinadas partes del proyecto según sus funciones dentro del proyecto. Con ello, se pueden desplegar las diferentes responsabilidades del proyecto a través de esta metodología, eliminando los problemas habituales entre intervinientes en las distintas fases del proyecto.
Las indiscutibles mejoras en término de tiempo de ejecución, gestión de materiales y control de costes del sistema BIM ha llevado a que algunos países, encabezados por el Reino Unido, exijan ya el empleo de este sistema en todos sus grandes proyectos de obra pública.
Los sistemas BIM y las realidades extendidas en el sector de la construcción
Los más importantes desarrolladores de software especializado para el diseño y gestión de proyectos han implementado la metodología BIM en sus propias plataformas, con lo que se está convirtiendo en un estándar también a nivel de software de proyecto en el sector de la construcción.
Además, estás plataformas han dado ya el salto a la nube, lo que ha permitido que los equipos pueden colaborar en el mismo modelo desde cualquier parte del mundo, con el consiguiente aumento de su eficacia.
Por otro lado, están proliferando los sitios web que proporcionan amplias bibliotecas de productos, permitiendo descargar modelos específicos para ser incorporados inmediatamente en el proyecto de arquitectura, simplificando la fase de definición de especificaciones. Con ello, se facilitan los procesos de toma de decisiones en la obra y la gestión de cambios en el proyecto, uno de los mayores desafíos de estos procesos.
Pero ha sido el progreso de la tecnología de modelado 3D y su visualización la que ha supuesto un avance más espectacular en el uso de esta metodología. Su combinación con dispositivos de realidad mixta, como las gafas Microsoft HoloLens 2, ha permitido que el proceso BIM se integre cada vez más en los proyectos y las obras, proporcionando una experiencia más completa y colaborativa para los usuarios que diseñan y construyen los espacios donde vivimos y trabajamos.
En efecto, actualmente se pueden utilizar las HoloLens para visualizar todo el proyecto desarrollado en una plataforma BIM directamente en la propia obra. Visualizar los lugares proyectados de paso de las instalaciones o la ubicación de los distintos elementos constructivos (pilares, tabiques, huecos, etc.) ya es posible, resolviendo un problema general de todas las obras: la dificultad para disponer de planos directamente en ella.
Así, se hace disponible la información en 3D de toda la obra, facilitando el cumplimiento de plazos, evitando errores que supongan duplicidades en la ejecución y, por ello, evitando costes adicionales.
Además, con estos dispositivos es posible compartir y visualizar los modelos 3D de forma simultánea en la obra entre los distintos participantes en ella, fomentando la colaboración en tiempo real, con plena transparencia en la información entre ellos, lo cual evita errores de comunicación y las demoras y costes asociados.
Disponer de la información sobre la propia obra permite a los encargados tomar decisiones sobre la marcha a partir de toda la información del proyecto, de modo que se puedan establecer los cambios necesarios directamente sobre los elementos físicos de la obra.
¿Qué podremos hacer en el futuro del sector de la construcción?
Las posibilidades de estas tecnologías, combinadas con la inteligencia artificial, son casi infinitas.
Así, las gafas de realidad mixta permitirán hacer mediciones sobre la propia obra, determinar las pendientes de los elementos que se estén instalando y compararlas con las de proyecto de forma automática o semiautomática, de modo que se reduzca notablemente el tiempo dedicado a la certificación y se eviten errores desde el principio de la instalación.
Será posible visualizar los siguientes pasos del plan de proyecto, determinando los materiales que es necesario incorporar en el siguiente periodo, así como la maquinaria y equipos auxiliares, de forma que la planificación de todos esos activos se realice de forma mucho más eficiente.
De forma integrada con las gafas HoloLens, será posible identificar los medios auxiliares y maquinaria presente en la obra, analizar su estado mantenimiento programado o compararlos con los de los planes de prevención e identificar, de forma automática, las discrepancias existentes, facilitando la coordinación de seguridad en la obra.
Por tanto, la combinación de la metodología BIM, la realidad mixta y la inteligencia artificial están llamados a transformar el sector de la construcción, facilitando que se alcancen los objetivos de eficiencia y sostenibilidad planteados en la UE para las próximas décadas.
¿Tienes en mente un proyecto del sector de la construcción y deseas saber qué solución tecnológica te resultaría más útil implementar?
¡Contáctanos para que podamos asesorarte!
Te recomendamos leer: 5 Tecnologías en Construcción que van a Revolucionar este Sector
Business Intelligence para la gestión de la Construcción Inteligente
Conoce qué es la metodología BIM y cómo está transformando el sector de la construcción